El Gobierno es incapaz de confeccionar su propio presupuesto en 2016. Al contar con un presupuesto prorrogado, el año pasado no pudo realizar ninguna inversión ordinaria, únicamente del canon de agua y por su inoperancia, tan solo se invirtió el 25% de lo presupuestado.
Las sorpresas no cesan en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Molina de Segura. Y es que desde que Esther Clavero es presidenta, cada sesión se convierte en un nuevo y único espectáculo.
La sesión ordinaria de septiembre vino acompañada de unas cuantas, entre ellas el no debate de la Cuenta General de 2016, en el que el Gobierno rehusó debatir con la portavoz del Grupo Municipal Popular, Sonia Carrillo, rechazando utilizar su primera intervención para que el PP no tuviera derecho a réplica.
No obstante, durante sus dos intervenciones continuadas Carrillo se encargó de sonrojar a un concejal de Hacienda que se acogió en su única intervención al “Aquí hemos venido a hablar de mi libro” de Francisco Umbral, sin intentar desbancar los argumentos de la edil popular al ser consciente de que todo lo esgrimió, era absolutamente cierto.
“Desde el PP vamos a votar en contra de la Cuenta General de 2016 porque no estamos de acuerdo en cómo se ha ejecutado el presupuesto. Han tenido ustedes (Gobierno) todo el año para confeccionar su propio presupuesto, pero no han sido capaces de ponerse de acuerdo y han preferido continuar con un presupuesto prorrogado que nos impedía llevar a cabo inversiones ordinarias. En cambio han contado con un remanente positivo y un canon de agua del que han ejecutado poco más del 20 por ciento de lo presupuestado. Esto significa una incapacidad y una parálisis en el tema de inversiones del Ayuntamiento”, comentó.
Pero la desidia del Gobierno va más allá, puesto que “de las partidas de urgente necesidad se han quedado 60.000€ sin ejecutar. Por eso vamos a decir no a la Cuenta General de 2016, porque éste no era el presupuesto que Molina de Segura se merecía”, alegó la portavoz.
CAMBIO DE LAS REGLAS DE JUEGO AL ANTOJO DE LA ALCALDESA
Para concluir su intervención, la edil popular puso de manifiesto la estrategia torticera de un Gobierno que cambia las reglas del juego cuando le interesa, al igual que el sentido del voto. “Como no han querido debatir con el PP ni nos han dado oportunidad de réplica, no sabemos qué votarán sus socios de Gobierno (al concejal de Hacienda), ya que Podemos se abstuvo en la Comisión Especial de Cuentas que se celebró el mes de julio. Quizá ahora hagan otra cosa. Pero lo que no puede ser es que yo debata conmigo misma y luego se abran turnos de intervención cuando interese al resto”.
Al final y como no podía ser de otra manera, Podemos cambió el sentido de su voto y mostró su apoyo a las Cuenta General de 2016.
0